En algunos lugares del mundo, el café no sólo es la principal producción y motor de la economía, también está fuertemente arraigado a la cultura, por eso repasemos cuáles son los países para que visiten los amantes del café.
En Jamaica, se produce la exquisita variedad Blue Mountains, precisamente en una zona de montañas «azules», uno de los puntos más elevados de la zona del Caribe. Los turistas pueden recorrer estas cumbres, y también visitar a las pequeñas granjas donde degustar de primera mano uno de los mejores cafés del mundo
En Colombia, encontramos el famoso Eje Cafetero, en el corazón de Colombia, más precisamente en el Valle del Cauca o Antioquia (foto). Allí se encuentras las haciendas coloniales que se dedican a la producción desde tiempos ancestrales, se pueden emprender tours temáticos, participar de catas y visitar las plantaciones en ciudades como Pereira y Armenia, principales productoras de uno de los cafés más valorados del mundo. La UNESCO ha considerado Patrimonio de la Humanidad al paisaje cultural de los cafetales de Colombia.
Países que los amantes del café deben visitar
Brasil produce un tercio del café que se consume en el mundo, por eso forma parte de las propuestas turísticas en muchos de sus puntos, en particular en lugares como Río de Janeiro o Sao Paulo.
Camerún es el país de África Oriental que constituye otro de los grandes productores cafeteros de todo el mundo, desde la época colonia. La zona cafetera es la del Valle Oku, donde se emplazan numerosas granjas, a fin de año se celebra la Festicoffee.
La capital de Etiopía, Addis Adaba, es famosa por su café «sidamo», tengamos en cuenta que el origen del café tal como lo conocemos, previo a su expansión a Oriente Medio, se remonta a este país. Las variedades y formas de preparación – un verdadero ritual – son muy apreciadas por los turistas extranjeros que gustan del café.
Si bien en Turquía es más popular beber té, los amantes del café pueden disfrutar de su café negro, tostado y molido, un procedimiento ancestral y artesanal que le confiere a cada taza una marcada singularidad. El café turco se bebe en una pequeña taza, sin colar, con un fuerte sedimento, que sin embargo le da sabor y carácter.
Muchos amantes del café se sorprenderán de saber que en Israel es también tradición, se bebe un café oscuro, intenso y muy sabroso similar al turco. Las cafeterías de la ciudad ofrecen además un ambiente ameno, con terrazas de increíbles vistas.
En Cuba el café intenso es también tradicional, se suele tomar un café fuerte, con cuerpo y mucha azúcar. Se sirven en las múltiples cafeterías de las ciudades, en particular de La Habana.
En Singapur hallamos el kopi, que es la bebida nacional. Los kopitiams son una parte importante de la vida social.
El kopi tiene por particularidad que los granos de café se tuestan usando mantequilla, ofreciendo a la infusión un aroma y consistencia muy peculiares.
Finalmente, Estados Unidos. El café forma parte del ADN americano. En particular, se recomienda visitar Seattle, donde nació la famosa cadena Starbucks y son numerosos los locales en toda la ciudad que ofrecen deliciosas tazas y un ambiente agradable. Se la considera la capital del café de los Estados Unidos.